Muchas veces consideramos que ponernos a nosotros mismos como la prioridad número uno es egoísta y desagradable, y no hay nada más alejado que eso.
El acto más generoso que podemos hacer por nosotros mismos y por los demás, es cuidar de nosotros. Ya que al sentirnos plenos y bien, los que nos rodean también salen ganando.
Cuando estamos bien con nosotros mismos y nuestra energía es positiva, se transmite hacia el afuera.
Sin embargo, estamos tan condicionados a creer que las cosas se desmoronan si nos tomamos un momento para nosotros.
Pero, si quieres ser feliz, realizar todas tus tareas del día a día con energía y cuidar de tus seres queridos, debes aprender a valorarte y a poner primero a la persona que vive dentro de tu corazón, cuerpo y mente.
Aquí te dejamos algunos consejos para que empieces a valorarte:
1. Comienza todos tus días reconociendo lo lindo que tienes
Tomate un momento, mientras todavía te estás despertando, y piensa en una cosa que valores de ti mismo.
Ya sea por tu fuerza, tu paciencia, tu perspectiva positiva, tu habilidad en los deportes, tu liderazgo, tu estilo de maquillarte, de vestir o tu creciente confianza. Solo tienes que dedicar unos segundos a esa cualidad antes de levantarte de la cama.
Es sorprendente cómo los recordatorios de las cosas lindas que tenemos, se filtran en todo lo que hacemos.
2. No te conformes
Algunas personas se quedan en trabajos que no les gustan solo por miedo a lo desconocido, otros se quedan en relaciones que ya no los hacen felices, algunos tienen amigos que no soportan, solo porque anhelan cualquier tipo de compañía. No vale la pena el costo. Mereces tranquilidad y ser escandalosamente feliz.
Si constantemente te dices a ti mismo: “Tiene que haber algo mejor que esto”, probablemente te estés conformando. No te conformes con menos. Busca lo que te llena el alma y te hace brillar.
3. Practica afirmaciones en el espejo
Lo que otros nos dicen, nos hace sentirnos más valorados y queridos, pero…
Uno no debería depender de lo que dicen los demás para quererse y valorarse. ¡Las palabras positivas que nos decimos a nosotros mismos, tienen demasiado poder!
Cuando podemos atrapar nuestra propia mirada y llenar nuestro espacio con palabras positivas, enviamos esa energía profundamente a nuestra propia psique. Las afirmaciones pueden ser algo así como “Soy amado y amoroso” o “Hoy me abrazo tal como soy”. ¡Haz el intento!
4. Presta atención a tus sueños
Prestar atención a tus sueños es un ciclo interminable de autovaloración y valor. Tus sueños son tus anhelos y los más profundos…
Cuando los iluminas, estás alimentando tu alma y tu corazón de una manera espiritual y emocionalmente satisfactoria. También te estás enseñando y empoderando para creer que tú eres digno de esos sueños.
5. Haz algo que ames, todos los días
Este es el mejor acto de amor propio. Muchas veces quedamos atrapados en nuestras rutinas diarias, y rara vez nos detenemos y decimos “Voy a hacer algo por mí, ahora mismo”.
Esto es super importante. Solo tomarte 5 minutos al día para cuidar de ti, es una manera de demostrarte que crees que vales y demostrártelo. ¡Haz el intento!