3 consejos rápidos para una piel luminosa

3 consejos rápidos para una piel luminosa

La belleza exterior viene desde adentro. La forma en la que nos vemos por fuera es un reflejo de cómo nos sentimos por dentro.

Bueno, ¿Sabías que la ciencia ha demostrado que existe un vínculo entre sentirse bien por dentro y tener una piel hermosa por fuera?

Un campo emergente llamado psicodermatología estudia la relación entre la mente y la piel, observando científicamente cómo nuestra piel puede manifestar lo que sucede dentro de nosotros y cómo podemos sanar y embellecer nuestra piel cultivando una vida interior más feliz.

La luminosidad es ese “brillo” que tiene tu piel, cuando eres feliz, está totalmente relacionada con cómo te sientes por dentro. El brillo y la luminosidad son el bienestar de tu cuerpo que se irradia a través de tu piel.

Aquí te dejamos algunos consejos rápidos,  para que empieces a cuidarte y tengas una piel sana y luminosa a donde quiera que vayas:

¡Hidratate!

Si te cuesta beber agua, te dejamos algunos trucos para que no olvides hacerlos:

Cada vez que alguien te ofrezca algo de beber (como en una reunión o en una visita) siempre debes decir que sí.

También puedes llevar una botella de agua contigo, a todas partes, y beber de ella cuando estas aburrida/o, en vez de mirar el teléfono.

Cuando tengas sed, siempre bebe tres vasos grandes, en lugar de uno solo.

Otra cosa que funciona muy bien, es ponerte alarmas cada cierta cantidad de tiempo.

La hidratación es necesaria para el funcionamiento de todas las células de nuestro cuerpo, y especialmente de nuestra piel.

Cuando no bebes suficiente agua, tu piel comienza a verse opaca y sin vida. La forma más rápida de recuperar ese brillo radiante en tu piel es beber una botella grande de agua.

Haz ejercicio y suda

El ejercicio es una de las mejores maneras de hacer que tu piel brille. Incluso 20 minutos de ejercicio que elevan tu ritmo cardíaco aceleran tu circulación, inician los procesos naturales de autocuración de tu cuerpo y aportan un poco de humedad a tus mejillas.

 

La buena noticia es que cualquier tipo de movimiento que eleve tu ritmo cardíaco funcionará. Así que ve al gimnasio, si te encanta hacer ejercicio, ve a bailar si te gusta el ritmo o haz algo de yoga, si eso es lo tuyo.

Pero también funciona caminar con un paso rápido, trabajar en el jardín o incluso limpiar la casa con más energía de lo habitual.

Olvídate del jabón e hidrátate de forma natural

Si beber agua te mantiene hidratada/o de adentro hacia afuera, saltarte el jabón ayuda a hacer lo mismo de afuera hacia adentro.

El jabón es excelente para limpiarse, pero seca increíblemente. Elimina los aceites naturales de tu piel, quitándole la luminosidad natural a tu piel.

En lugar de jabón, prueba un limpiador suave, adecuado para tu tipo de piel.

Todo esto crea un ciclo de retroalimentación positiva: ¡Cuando te sientes mejor, te ves mejor!

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